revista de divulgación del Instituto de Astrofísica de Andalucía

Pilares e Incertidumbres

Mujeres en áreas STEM

Por Josefa Masegosa (IAA-CSIC)
Pilares científicos

Hace treinta años, en el IAA nos hicimos la pregunta de por qué hay tan pocas mujeres en áreas STEM. 

Un trabajo pionero realizado en el IAA en 1994 mostró que en el CSIC sólo un 20,1 % del personal científico en plantilla eran mujeres. Este estudio estadístico se repitió en 2002 y se había producido un aumento hasta 22,6 % (Moya de Guerra et al 2002, Arbor 172, 679, en Monográfico sobre Ciencia y tecnología en el CSIC: una visión de género).  

Ese año se creó la Comisión Mujeres y Ciencia y desde entonces se produce un informe anual sobre la presencia de la mujer en el CSIC. 

En 2011, la comisión publicó en la revista Arbor una actualización sobre los 10 años de la comisión, y para nuestra sorpresa el porcentaje de personal científico era menor, un 21%. Treinta años después, tal como se afirma en el informe de la Comisión de Mujeres y Ciencia del CSIC de 2023, seguimos con un exiguo 22,2 %. 

En lo que respecta al IAA, en 1994 había un 18,8%, en 2002 subió a un 21,4% y en el último informe correspondiente a 2022 se alcanza un 22%. 

Los datos son desalentadores ya que a pesar de que se han implementado medidas de igualdad durante estos años, comités paritarios, visibilización de mujeres en los diferentes estamentos, los números no parecen dar un buen diagnóstico, aunque tampoco han empeorado. 

Durante todos estos años se han venido realizando actividades para visibilizar el papel de las mujeres en la Ciencia. Toda esta actividad previa se plasmó en la implementación de un plan de Igualdad en 2018 para el IAA, además del plan de igualdad del CSIC, para cubrir todas las necesidades  a nivel local. 

Dicho plan contempla dos ejes: medidas de conciliación de la vida laboral y familiar (sala de lactancia, teletrabajo, guardería) y medidas de igualdad de género (formación, visibilización, comités paritarios, informes de impacto de género). A día de hoy podemos concluir que este plan ha sido ejecutado con éxito. Sin embargo se observa que los números no cambian a lo largo de los años. En 2022 seguimos con un 22% de personal científico en plantilla.

Además, encontramos un hecho bastante preocupante y es la tendencia lenta pero mantenida en el tiempo de que el número de mujeres que optan a una posición predoctoral es cada vez menor. Esta tendencia no es particular de nuestro instituto donde barajamos números pequeños, sino que también ha sido observada en toda el área de Físicas y Tecnologías Físicas del CSIC (informe CMyC 2023).
 


Gráfico de tijera del porcentaje de mujeres en cada etapa de la carrera investigadora para el IAA. Crédito: Comisión de Igualdad del IAA-CSIC

 

Incertidumbres

La pregunta que nos planteamos es qué futuro nos espera con un flujo de entrada cada vez menor como el que se observa.

Existe una gran preocupación en la profesión sobre la naturaleza de este fenómeno, que además se da a nivel global.  

Por ello, la Asamblea General de Naciones Unidas de 22 de Diciembre de 2015 declaró el 11 de febrero como ”Día Internacional de las Mujer y las Niña en la Ciencia”, en reconocimiento al papel clave que desempeñan las mujeres en la comunidad científica y tecnológica. 

En este día se pretende hacer visible a las mujeres investigadoras y se realizan actos de diversa naturaleza (encuentros de escolares con científicas, debates, mesas redondas, etc) con el fin de potenciar las vocaciones científicas entre las chicas. Este año se ha celebrado la novena asamblea del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia en Nueva York con miras a acelerar el progreso hacia el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible 16 y 17. El tema principal de dicha asamblea ha sido “Las mujeres y las niñas en el liderazgo científico, una nueva era para la sostenibilidad”, y como subtema “Piensa en ciencia... Piensa en la paz”.

En este punto hemos de ser optimistas y seguir trabajando por aumentar las vocaciones científicas. 

Ya no estamos en 1994, donde las grandes instituciones daban la espalda a este problema, sino que todo el trabajo realizado en los diferentes países se ha convertido en un movimiento global para mejorar la educación de las mujeres y eliminar las barreras que han impedido a las mujeres obtener mayor liderazgo en la Ciencia. 

En palabras de Antonio Guterres, secretario general de Naciones Unidas: “Las mujeres y las niñas deben estar en la ciencia. Es hora de reconocer que la inclusión fomenta la innovación, y de dejar que cada mujer y cada niña desarrolle su verdadero potencial”.

No estoy segura de si yo alcanzaré a ver como esta tubería goteadora por donde se va perdiendo talento científico cerrará sus agujeros, pero de lo que sí estoy segura es de que caminamos en la dirección correcta.
 


Crédito: UNESCO, Institute for Statistics